Tiene lugar en un pequeño pueblo del Ártico en Suecia, donde cada año, un equipo de construcción trabaja sin parar para una obra singular: un hotel de hielo.
Es uno de los hoteles más curiosos del mundo porque cada año tienen que volver a construirlo, puesto que al elevarse las temperaturas, el hielo se derrite y el hotel se viene abajo. Por eso, en el mes de noviembre de este año, muchos constructores trabajaron muy duro para levantar este hotel, al que acuden muchas personas para pasar un invierno diferente y especial.
Es como un iglú grande que permite manterse calientes en su interior. Cuenta con acceso a internet, aparcamiento, baño turco, cuna, habitación para no fumadores, wifi, restaurante, sala de conferencias, sala de tv, tienda, entre otros servicios.
Fuente: http://www.planetacurioso.com/
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